La candidata de Juntos por el Cambio consideró clave que la oposición se imponga también en la provincia de Buenos Aires para que Unión por la Patria "no se agazape ahí".
La candidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, sostuvo hoy en relación a las elecciones que “lo fundamental no es solamente ganar, sino establecerse y generar las condiciones para terminar con el modelo del kirchnerismo”, y consideró clave en ese sentido que la oposición se imponga también en la provincia de Buenos Aires para que la fuerza política de Cristina Kirchner “no se agazape ahí”.
En este sentido, la ex ministra de Seguridad de Mauricio Macri negó que el principal rival en estas elecciones sea Javier Milei, y cargó las tintas contra el kirchnerismo.
“Yo creo que lo que hay que vencer en Argentina es un sistema instalado, que es el kirchnerismo, que ha empobrecido, degradado la cultura, la educación, la seguridad de los argentinos y que además no puede estar preparándose para volver. Lo fundamental no es solamente ganar, sino establecerse y generar las condiciones para terminar con el modelo del kirchnerismo”, enfatizó.
“No nos da lo mismo, nosotros creemos que somos los que estamos en condiciones de generar esa posibilidad histórica que tiene la Argentina, de cambiar la matriz política del peronismo como partido dominante, que cuando no gobierna está como agazapado. Por eso tenemos el objetivo claro de ganar en la provincia de Buenos Aires. No queremos que se agazapen ahí”, agregó.
En otro orden, se mostró satisfecha con el resultado obtenido por su lista en las PASO del pasado domingo, cuando le ganó por amplio margen a Horacio Rodríguez Larreta en la interna de Juntos por el Cambio. “Tuvimos una reivindicación importante”, se jactó Bullrich en una entrevista al diario Clarín.
“Yo lo veo como un triunfo, porque creo que nosotros teníamos la lectura más correcta de cómo interpretar a la sociedad, de cómo plantear el modelo del cambio que se precisa en este momento histórico de la Argentina”, expresó.
Recordó que “en términos numéricos, partidarios” la lista de Rodríguez Larreta fue mucho más apoyada y tuvo como precandidatos al presidente de la UCR, Gerardo Morales, de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, y del Peronismo Republicano, Miguel Pichetto.
“Nosotros construimos con mucho esfuerzo una decisión de liderar este proyecto de Juntos por el Cambio, de lograr que nuestra propuesta de cambio profundo, verdadero, de shock, fuese el que representara a la fuerza en la elección y que tuviese un liderazgo como el mío, que tiene espaldas para dar las batallas que hay que dar en Argentina. Desde esa perspectiva, tarea cumplida. Fue una elección importantísima, de David contra Goliath”, interpretó.
A nivel coalición, Bullrich reconoció que la performance general estuvo un poco por debajo, y lo atribuyó parcialmente a la intensidad de la pelea interna con el sector que apoyaba a Rodríguez Larreta.
“Desde la de Juntos por el Cambio creo que es poca la experiencia de la sociedad en comprender unas PASO, y eso generó temor en mucha gente que pensó que no íbamos a ser capaces de construir rápidamente el espacio. Eso nos costó votos, me parece.
Nunca se había vivido un proceso así. Parecía que nos íbamos a quebrar y eso nos quitó un poco de volumen político, que lo vamos a recuperar en estos dos meses”, aseguró.
Acerca de esto último, Bullrich se mostró confiada en que muchos votos que perdieron en las PASO a manos de Milei van a volver a Juntos por el Cambio en octubre.
“Yo creo que pueden volver muchos votos, porque hubo una idea en el último tiempo de que estábamos parejos, iguales, de que nosotros no ganábamos. Eso hizo que ese voto en disputa que siempre veíamos con Milei, se corriese. Lo vamos a recuperar”, ratificó.
Por último, la candidata presidencial de Juntos por el Cambio se diferenció del líder de La Libertad Avanza al sostener que de ganar las elecciones, ella no va a cerrar el Conicet y arancelar la educación o la salud pública.
“No vamos a privatizar nunca, ni la salud ni la educación pública. Al Conicet lo vamos a desburocratizar y desideologizar”, prometió.